Volver a las calles y ganar los medios, el desafío de la nueva generación provida

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Era necesario. Había que volver a salir a las calles y hacernos escuchar. Queríamos que el Congreso volviera a escucharnos. Por eso, el pasado miércoles 27 de septiembre participamos de la marcha por la vida para que se haga eco nuestro compromiso por defender la vida de mujeres y niños. La concentración se realizó en la Plaza de Mayo y desde allí marchamos hasta el Congreso de la Nación para decir una vez más que el aborto mata a un niño y destruye a una mujer.

Con la alegría que nos caracteriza, los miembros de Frente Joven nos unimos a la consigna para defender lo más preciado y lo primero que debemos defender: la vida. “Cuando decimos sí a la vida, decimos sí a ese niño que tiene vida desde el instante de la concepción”, manifestó Alejandro Geyer, representante de la Fundación Gospa y coordinador de la Marcha por la Vida.

La jornada comenzó alrededor de las 18, y cerca de una hora después, la Plaza Dos Congresos se tiñó de banderas, mensajes y cantos que nos permitieron expresar públicamente que debemos poner lo primero al principio, “porque sin vida no hay derechos, y sin derechos, no hay futuro”.

El resto del país tampoco se quedó atrás. La participación ciudadana en esta marcha se extendió, entre otras localidades, a las provincias de Córdoba, Mendoza, Tucumán, San Luis, Santa Fe, Santiago del Estero, Neuquén, San Juan, La Rioja, Misiones, Salta y San Miguel de Tucumán.

Y no sólo era necesario volver a salir a la calle. También los medios de comunicación debían escuchar el reclamo de esta marcha, que se realizó en la misma fecha que se conmemoran los “Derechos de niños y adolescentes”.

Por eso, estuvimos presentes en el estudio de RT en Español, donde debatimos sobre el intento de despenalización del aborto, y sostuvimos que “el aborto es una nueva forma de violencia contra la mujer”.

Una vez más, volvimos a sentir ese fervor que se contagia cuando nos unimos y salimos a defender la vida. Ahora, es nuestro turno para comprometernos en acciones concretas y volver a gestar una nueva generación de jóvenes próvida.